Neutralidad en la red
Hoy Internet es un servicio global que permite el acceso a la información para todos dejando pocos rincones sin cobertura. Además es fuente de dinamización del avance y de la innovación de la economía. Se trata de un servicio que ha llegado a ser muy necesario, casi imprescindible para una sociedad que ha introducido Internet en su día a día.
Sin embargo, conforme fue creciendo su uso comenzó a preocupar el hecho de que los operadores de red tienen la capacidad de favorecer ciertos flujos de datos respecto de otros, u otorgar ventajas injustas de unos contenidos sobre otros. Para tener un Internet libre y abierto surgió la Neutralidad en la red, hasta que en Junio de 2018 Donald Trump decidió romperla en detrimento de los usuarios finales y las pequeñas empresas.
Se acabó la Neutralidad en la red en EEUU pero, ¿cómo afecta a Europa y al resto del mundo? Se abre la puerta a un Internet a diferentes velocidades basado en criterios económicos y políticos. En Europa, los gobiernos defienden el mantenimiento de la Neutralidad en la Red, pero los servicios que dependan de un servidor ubicado en EEUU se verán afectados.
En Europa también existe el problema de Vodafone, que podría haber roto la Neutralidad con los servicios Vodafone Pass ya que priorizan determinados servicios sobre otros. Por ejemplo, quien tenga como operador a Vodafone, le será más barato usar Whatsapp o Telegram que Line, por ejemplo.
En España, Vodafone asegura que no discrimina contenido y que cualquier plataforma o empresa puede unirse a sus “Pass”. La CNMC (el órgano regulador en España) permite que Vodafone analice todo el tráfico móvil, lo cual choca con el artículo 18.3 de la Constitución española que garantiza el secreto de las comunicaciones. No obstante, cada vez son más los servicios que ofrecen la posibilidad de encriptar el contenido de los usuarios.
Pero, ¿qué ventajas tiene el fin de la neutralidad en la red? Los defensores de esta medida esgrimen que se conseguirá mayor libertad. Los usuarios que quieran podrán pagar por un Internet de mejor calidad; los que no, deberán conformarse con otra cosa: así funciona el capitalismo.
En este sentido, los defensores del fin de la neutralidad de la Red defienden la medida porque abre definitivamente el mercado y lo liberaliza hasta sus últimas consecuencias. Cada compañía podrá ofertar los precios que decida y no tener que atenerse a una regulación.
Cuando la Neutralidad en la Red desaparece, tendremos un Internet de dos velocidades. Una para aquellos que pagan una tarifa y otra, con muchas más ventajas para las empresas o usuarios que escogen una tarifa más elevada. Esto va a repercutir directamente sobre las pequeñas y medianas empresas y sobre aspectos tan importantes como la velocidad de carga web, el posicionamiento y la visibilidad en buscadores, así como en la experiencia de los usuarios.
En definitiva, cuando la neutralidad en la red desaparece se ve reducida la libertad de los estratos inferiores de la sociedad en pro de la infinita libertad, sin regulaciones, de los más poderosos.
Fuente: blog.andalucuadigital.es, sinolgic.net, internetsociety.org, merca2.es